¿Cuándo fue la última vez que te tomaste el tiempo para revisar tu ojos? Cuando tenemos algún malestar solemos recurrir a los remedios y medicamentos que ya conocemos, si no funcionan buscamos ayuda de un médico y cuándo nuestro médico de cabecera no logra solucionar nuestro problema, es entonces que buscamos un especialista. ¿Pero qué sucede con nuestros ojos? Una buena cantidad de problemas oculares no generan molestias o síntomas hasta que están demasiado avanzados o no pueden remediarse.
Desafortunadamente, el equipo necesario para una revisión oftalmológica completa no se encuentra en todos los consultorios médicos, y un médico general muchas veces no tendrá los medios ni los conocimientos necesarios para poder dar un diagnóstico y tratamiento adecuado. Por eso es importante una revisión por lo menos una vez al año. Mientras logras tener el tiempo para acudir a una revisión, aquí te dejo unos cuántos métodos fáciles y rápidos para identificar problemas visuales, la mejor parte es que lo puedes hacer ahora mismo utilizando únicamente la pantalla que estás leyendo.
Debo mencionar que el hecho de que no encuentres nada en estas pruebas no quiere decir que no tengas ningún problema ocular, y aún así recomiendo revisiones de rutina.
1. Pantalleo
Está es la prueba más sencilla, pudiese parecer obvia, pero no miento cuando digo que he tenido muchos pacientes que lo hicieron por accidente y motivo de ello decidieron acudir a consulta. Se realiza de una manera muy fácil, busca algo que tenga texto y se encuentre a la distancia. Cubre uno de tus ojos, observa las letras, parpadea, observa las letras de nuevo. Ahora descubre ese ojo y cubre el otro de manera rápida, parpadea. La calidad y definición de la imagen que vez con ambos ojos debe ser muy similar, si notas que uno de ellos tiene una imagen de menor calidad no es normal. Ambos ojos deberían poder ver de la misma manera.
2. Prueba Dicromática
Está prueba está diseñada para identificar problemas de miopía o hipermetropía tan pequeños como una 0.25 dioptrías. Básicamente funciona por el efecto que sufren en su dirección los rayos de luz de diferentes colores al entrar en tu ojo. La prueba se realiza muy fácilmente, cubre uno de tus ojos y observa los letras que están sobre los colores en la imagen de abajo. Si las letras en el color rojo se ven más nítidas que en el color verde significa que tienes miopía en algún grado. Si las letras en el color verde se ven más nítidas que las que están en el color rojo significa que tienes hipermetropía en algún grado. Repite la prueba para el otro ojo.
3. Reloj Astigmático
Esta prueba es también muy sencilla, ayuda a identificar si tienes algún grado de astigmatismo. Como breve explicación, el astigmatismo se produce cuando no todos los meridianos de tu ojo pueden enfocar una imagen con la misma claridad. Para realizarla tapa uno de tus ojos, observa el abanico de líneas que se encuentra en la imagen de abajo. Lo normal, en un paciente sin astigmatismo es que todas las líneas se vieran con la misma definición. Si alguna de las líneas se ve más borrosa que otras podemos asumir que existe algún grado de astigmatismo. Repite la prueba para el ojo contralateral.
4. Cartilla de Amsler
Esta prueba sirve para saber si tienes alguna alteración a nivel macular. La mácula es la parte del interior de tu ojo que cuenta con los receptores de luz para visión fina, es la responsable de tu visión central, con la que podemos leer y realizar la mayoría de nuestras actividades. Se puede ver alterada por enfermedades como la diabetes, inflamación severa o incluso por cambios degenerativos por la edad. Para realizarla lo que debes hacer es cubrir uno de tus ojos, mantenerte viendo al punto central de la cuadrícula que aparece en la imagen de abajo. El paso siguiente es , poner un poco de atención a la cuadrícula alrededor del punto. ¿Todas las líneas se ven completas? ¿Todas las líneas se ven rectas? Si no es así, podríamos encontrarnos ante un problema macular. Repite la prueba para el ojo contralateral.
Espero que estas pruebas te hayan sido de utilidad y te hayan hecho un poco más consciente de lo importante que son tus ojos para ti y para tu vida diaria. Por favor no los descuides, porque son muy valiosos. Finalmente te dejo tres datos duros relacionados a la salud visual para que los tengas en cuenta y notes la importancia de revisarte con un oftalmólogo ocasionalmente.
Si un niño tiene problemas visuales, deben corregirse antes de los ocho años de edad para que pueda alcanzar su completo potencial visual, de otra manera se queda trunco aunque se resuelva el problema.
La diabetes es una causa importante de ceguera, si se detecta a tiempo puede limitarse el daño , todo paciente con diabetes debe acudir con el oftalmólogo cada 6 meses o máximo un año.
El glaucoma es la primera causa de ceguera irreversible a nivel mundial, no suele dar síntomas hasta que está muy avanzado, desafortunadamente la única manera de sospecharlo a tiempo es por la revisión de un médico oftalmólogo.